DESARROLLO A ESCALA HUMANA

 Desarrollo a Escala Humana una opción para el futuro 

Desarrollo a Escala Humana? – Santo Tomás en Línea

        El Desarrollo a Escala Humana fue propuesto por Max Neef, el cual promueve la ubicación del ser humano su dimensión mas subjetiva en el centro del análisis sobre el desarrollo del mismo, asumiendo a si mismo que su teoría se basa en la búsqueda de este desarrollo a través de la satisfacción de las necesidades humanas básicas. Este se encuentra divido en tres partes, la primera hace referencia a la relectura de la crisis latinoamericana, la segunda se basa en el desarrollo y necesidad humanas y como ultima parte tenemos al desarrollo y autodependencia. Cada una será expuesta a continuación. 

La relectura de la crisis latinoamericana se basa principalmente en la crisis y perplejidad que América Latina esta pasando actualmente. La perplejidad, es resultante de una situación a la que no se le conoce por completo, esta se ha ido manteniendo en una especie de callejón sin salida, el cual bloquea el paso hacia las soluciones imaginativas, tanto novedosas como audaces. Se explica con claridad que las recetas convencionales y tradicionales, de cualquier trinchera que vengan, esta no funcionará. Sin embargo, hay una especie de temor paralizante que inhibe el diseño de caminos radicalmente distintos que pudieran eventualmente sacarnos del embrollo. 

En base a lo político, esta crisis se ve influenciada por la ineficacia de las instituciones políticas representativas frente a la acción de las élites de poder financiero, debido a la internacionalización creciente de ciertas decisiones políticas y así mismo por la falta de control que la ciudadanía tiene sobre las burocracias públicas. Por otra parte, también contribuye a la configuración de un universo político carente de fundamentos éticos, la tecnificación del control de la vida social, la carrera armamentista y la falta de una cultura democrática el cual esta arraigada a las sociedades latinoamericanas. 

Por otra parte, en lo social, esta creciente fragmentación de identidades socioculturales, la falta de integración y comunicación entre movimientos sociales, la creciente exclusión social y política y el empobrecimiento de grandes masas, han hecho inmanejables los conflictos en el seno de las sociedades, a la vez que imposibilitan las respuestas constructivas a tales conflictos. 

Y en base a lo económico, el sistema de dominación sufre cambios profundos actualmente, en el cual inciden de manera sustancial la mundialización de la economía, el auge del capital financiero con su enorme poder concentrador, la crisis del Estado de Bienestar, la creciente participación del complejo militar en la vida económica de los países, y los múltiples efectos de las sucesivas oleadas tecnológicas en los patrones de producción y consumo. 

En base a las limitaciones para nuestro desarrollo observamos que su comportamiento histórico a través de las políticas económicas y de desarrollo que se han aplicado en Latinoamérica durante las ultimas cuatro décadas, lo primero que se detectó es un claro proceso pendular. Dichos períodos de expansión acaban generando desequilibrios financieros y monetarios, el cual derivan en respuestas estabilizadoras que, a su vez, las cuales acaban generando elevados costos sociales, lo que induce a nuevos impulsos de expansión. 

Por otra parte, tenemos la frustración del desarrollismo y del monetarismo, donde el desarrollismo fue una generadora de ideas y de corrientes de pensamiento. Durante el período de su predominio en que surge la CEPAL, el Banco Interamericano de Desarrollo, la ALALC, el Pacto Andino y otras importantes iniciativas regionales tales como la Alianza para el Progreso. Sin embargo, en los contextos nacionales aparecen las instituciones de planificación, las corporaciones de fomento de la producción en sus distintas versiones, las políticas que impulsan la industrialización y revierten la composición demográfica de países hasta entonces predominantemente rurales. 

Por otra parte, el monetarismo neo-liberal, que había hecho sus incursiones esporádicas sin lograr imponer su carácter más allá de episodios coyunturales donde comienza a irrumpir con toda su energía. La historia del neo-liberalismo monetarista es otra y bien distinta. Si embargo, el desarrollo fue generador de pensamiento, el monetarismo ha sido fabricante de recetas; por lo menos el que hemos visto aplicado en nuestros países. En nuestro medio no es posible detectar propiamente un pensamiento o una filosofía neo-liberales. 

A diferencia del desarrollismo, el neo-liberalismo monetarista ha fracasado en un período mucho más breve y de manera mucho más estrepitosa. Más aún, se parece a un derrumbe fenicio, que nada deja después de su paso excepto un inmenso vacío. El que hoy en día solo logre sustentarse, en América Latina, con el apoyo de regímenes dictatoriales o pseudo-democráticos, es prueba suficiente de que la presión generada por los costos sociales solo puede mantenerse bajo control con la aplicación de medidas represivas. 

Hay que destacar, por último, que ambas concepciones económicas han ido compartiendo algunos elementos, aunque con distinta intensidad. Las dos han pecado de mecanicistas y de provocar resultados económicos concentradores. Para el neo-liberalismo, el crecimiento es un fin en si mismo y la concentración se acepta como una consecuencia natural. Para el desarrollismo, el crecimiento es una condición económica que conllevara desarrollo. 

En la segunda parte, encontramos al desarrollo y necesidades humanas reconocer la incompletitud e insuficiencia de las teorías económicas y sociales que han servido de sustento y orientación a 1os procesos de desarrollo hasta el presente. Significa tomar conciencia, concretamente, de que en un mundo cada vez mas heterogéneo por su creciente e inevitable interdependencia, por otra parte, la aplicación de modelos de desarrollo sustentados en teorías mecanicistas, acompañados de indicadores agregados y homogeneizantes, representa una ruta segura hacia nuevas inquietantes las cuales generarían frustraciones. Un Desarrollo a Escala Humana, esta orientado en gran medid hacia la satisfacción de las necesidades humanes, el cual exige un nuevo modo de interpretar la realidad. El desafío consiste en que políticos, planificadores, promotores y, sobre todo, los actores del desarrollo sean capaces de manejar el enfoque de las necesidades humanas, para orientar sus acciones y aspiraciones. 

Las necesidades humanas pueden desagregarse conforme a los múltiples criterios, y ciencias humanas que ofrecen en este sentido. En este documento se combinan dos criterios posibles de desagrega- don: según categorías existenciales y según categorías axiológicas. Por otra parte, de la clasificación propuesta se desprende, por ejemplo, la alimentación y abrigo el cual no deben considerarse como necesidades, sino como satisfactores de la necesidad fundamental de subsistencia. Del mismo modo, la educación, el estudio, la investigación, la estimulación y la meditación son satisfactores de la necesidad de entendimiento. Los sistemas curativos, la prevención y 1os esquemas de salud, en general, son satisfactores de necesidad de protección. 

Cada sistema económico, social y político adopta diferentes estilos para la satisfacción de las mismas necesidades humanas fundamentales. En cada sistema, éstas se satisfacen o no, a través de la generación o la no generación de diferentes tipos de satisfactores. Uno de 1os aspectos que define una cultura es su elección de satisfactores. Las necesidades humanas fundamentales de un individuo que pertenece a una sociedad consumista son las mismas de aquel que pertenece a una sociedad ascética. Lo que cambia es la elección de cantidad y calidad de 1os satisfactores o las posibilidades de tener acceso a 1os satisfactores requeridos. 

El sistema propuesto permite la reinterpretación del concepto de pobreza. Este concepto tradicional es limitado y restringido, puesto que se refiere exclusivamente a la situación de aquellas personas que pueden clasificarse por debajo de un determinado umbral de ingreso, dicha noción es estrictamente economicista. Se sugiere no hablar de pobreza, sino de pobrezas. Puesto que cualquier necesidad humana fundamental que no es adecuadamente satisfecha revela una pobreza humana. La pobreza de subsistencia es debido a la alimentación y abrigo insuficiente; y de protección debido a sistemas de salud ineficientes, a la violencia, la carrera armamentista, entre otras.; de afecto, de entendimiento, de participación, de identidad, etc. Pero las pobrezas no son solo pobrezas. Son mucho mas que eso, es decir, cada pobreza genera patologías, toda vez que rebasa límites críticos de intensidad y duración. 

Y, por último, tenemos el desarrollo y la autodependencia en el cual las pautas de consumo que el mundo rico exporta e impone al mundo en desarrollo somete a este último a relaciones de intercambio que agudizan su dependencia, perpetúan sus desequilibrios internos y amenazan su identidad cultural. Son los países industrializados los que controlan la producción y comercialización de los insumos y productos de las tecnologías de punta y de gran parte de la producción industrial. La dependencia en materia de pautas de consumo, que desde los propios países en desarrollo es alentada por los grupos de poder económico que se benefician con la comercialización correspondiente, ha aportado de modo significativo a1monto de las deudas externas de los países latinoamericanos. 

En conclusión, este texto nos da a entender que es un proceso capaz de fomentar dicha participación en las decisiones, la creatividad social, la autonomía política, la justa distribución de la riqueza y la tolerancia frente a la diversidad de identidades, por otra parte, la autodependencia constituye un elemento decisivo en la articulación de los seres humanos con la naturaleza y la tecnología, de lo personal con lo social, de lo micro con lo macro, de la autonomía con la planificación y de la Sociedad Civil con el Estado. 



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